El calor llegó para quedarse y con ello los incendios empiezan a ser habituales en toda España. Este mes han estado repartidos por todo el país y con la falta de medios las situaciones han sido complicadas en algunos incendios, siendo necesario elevar el riesgo en varias provincias. Comenzamos:

Según datos de Copernicus EMS, hasta el mes de mayo, han ardido 25.899 hectáreas, lo que supone un aumento de mas del 300% respecto a la media de los últimos 10 años. Del total de las hectáreas afectadas, el 70 % corresponden a Asturias y Cantabria, dado los episodios que afectaron a estas zonas durante los primeros meses del año.


El mes comenzaba con un importante incendio forestal en Monte Sollera, Asturias, donde fue necesario activar el nivel 1 de peligrosidad por la cercanía de las casas. Finalmente no hubo que lamentar daños materiales pero ardieron mas de 300 hectáreas.
A finales de mes la situación se complicó en Extremadura, donde se juntaron hasta tres incendios activos en nivel 1 a la vez, dos en Badajoz y otro en Cáceres. Sin la ayuda de la BRIF de Pinofranqueado los incendios duraron hasta 24 horas activos, llegándose a reproducir el incendio forestal de Trujillo debido a las altas temperaturas y el fuerte viento. Casi 300 hectáreas afectaron en total los tres incendios durante el tiempo que permanecieron activos.
En el ámbito internacional, el peor incendio lo ha registrado Canadá, donde el Chuckegg Creek Fire ha puesto en jaque a la capital de Alberta, dejando imágenes del humo llegando a la ciudad y afectando a más de 230.000 hectáreas. Una imagen mas de que los incendios forestales han dejado de ser un problema del mundo rural
Con junio comienza la temporada de riesgo alto de incendios forestales, y con ello llegan el 100% de los medios. La incorporación de las BRIF supondrá una gran ayuda para los medios locales ya que se espera que con el calor y la falta de lluvias parece que van a provocar un verano complicado, esperemos que los pronósticos fallen y tengamos una campaña tranquila.