El verano de 2012 comenzó con una fuerte sequía con precipitaciones medias de menos del 50% respecto a los últimos años y con unas temperaturas por encima de lo normal en la parte este de la Península. El 22 de julio, sobre las 13:00 horas se inició un incendio forestal en la Jonquera dentro de la comarca del Alt Empordá en Girona. Un cigarro mal apagado provocaría una catástrofe ambiental de inimaginables consecuencias. Ese mismo día, otro incendio forestal comenzaba en el termino municipal de Portbou, también en Girona y según las investigaciones, el incendio fue provocado también por una colilla mal apagada.

El incendio de La Jonquera rápidamente atravesó la carretera AP-7 obligando a cortar el tráfico de la misma. También fue necesario cortar casi una docena de carreteras comarcales y la línea de AVE. La gran fuerza del incendio hizo que ardiesen unas 10.000 hectáreas en tan solo 8 horas impulsado por el viento de Tramontana con rachas de más de 90km/h, lo que obligó a declarar el nivel 2 de emergencias. Mas de 80 dotaciones de los bomberos de Cataluña trabajaron para su control y fue necesaria la intervención de la UME con más de 150 efectivos, también colaboraron medios de Francia y estatales, como varios helicópteros de gran capacidad Kamov y la BRIF con base en Daroca. En total, unos 1.000 especialistas trabajaron durante días para lograr controlar el incendio.

Por otro lado, el incendio forestal que comenzaba en Portbou se cobraba las dos primeras víctimas mortales, ya que saltaron desde un acantilado huyendo de las llamas. Otras 20 fueron heridas por los mismos motivos. Aunque con gran virulencia de avance, el gran trabajo de los medios permitió que se controlara rápidamente, afectando solo a 50 hectáreas
En La Jonquera, las llamas dejaban dos fallecidos, uno por no superar las quemaduras en el 65% de su cuerpo, y el otro al sufrir una parada cardiaca al verse rodeado por el fuego en su jardín. Ocho días más tarde, el incendio se declaraba extinguido, con un balance final de 10.467 hectáreas forestales y casi 4.000 agrícolas, 2 víctimas mortales y cientos de daños personales como granjas o edificaciones. Con estos datos, se convirtió en el 10º incendio mas destructivo de la historia reciente de España y el mayor en Cataluña en el siglo XXI.
Fantástica iniciativa , que nos hace saber y conocer a qué nos enfrentamos si no actuamos con previsión inteligente sobre el terreno antes de que esto suceda.